Fabiola García Magaña, directora del Instituto Municipal de la Mujer en Mérida, comunicó algunas de las respuestas y solicitudes que las mujeres han realizado al Instituto dentro de su administración, como la atención a la violencia y su programa de becas.
Aseguró que el 80 por ciento de las solicitudes hacia el Instituto van encaminadas a alguna situación de violencia, el otro 20 por ciento responde a inquietudes de las mujeres sobre desarrollarse en temas como la autoestima o a su reciente programa de becas Mujeres Madres Autónomas.
“Dentro de los servicios de estas sedes está la Línea Mujer, que todos los días atiende solicitudes de índole legal, sicológica y alguna gestoría social y últimamente por el tema de la becas que otorgó el Instituto de la Mujer”, expresó Fabiola García.
La directora también comentó que el tipo de violencia más frecuente es la sicológica, a la cual le sigue la violencia física. Dentro de su gestión también ha visto el avance de otros tipos de violencia como la vicaria y la obstétrica, por lo que una de las acciones continuas es el trabajo de actualización de los equipos que se dedican a atender estos casos.
“Hemos visto que las edades que más solicitan estos servicios van de los 25 años a los 59 años. Aunque también se ha dado el apoyo a chicas adolescentes respecto a la violencia digital, abusos sexuales y violaciones. Las atendemos y las canalizamos a otra dependencia, porque que sean menores de edad limita la facultad que tiene el Instituto”, expresó la directora.
En los últimos años, la violencia hacia la mujer y el marco legal para hablar de estos casos se ha transformado.
“Lamentablemente el tema de la tecnología y el tema virtual, junto con la pandemia, trajo el aumento de la violencia digital. Hoy por hoy ya está legislado y ya está en una normatividad”.
En cuanto al sistema legal en los casos de violencia, la directora lamentó que sean las víctimas quienes tengan que presentar las evidencias ante la Fiscalía para que procedan las denuncias.
“El Sistema Judicial recae sobre la víctima, la que acusa, tiene que demostrar. Esta demostración puede ser con testigos, con documentos, pero tiene que ser por parte de ellas”.
Actualmente, en la zona sur y las comisarías de la capital del estado, se ha visto una demanda de servicios como talleres de mujeres y de masculinidades.
“En estos temas ha habido un poco menos de resistencia, me gustaría pensar que en los últimos seis años que me ha tocado estar como directora de ese Instituto, ha habido más participación, esto quiere decir que es posible que se reduzcan los ejercicios de violencia. La participación de los hombres en los talleres de masculinidades es muy importante”, agregó la directora.