‘El viaje de una vida’ planeado por aquellos que pagaron por una cabina en un crucero de tres años de duración por el mundo concluyó de forma abrupta tras reconocer la compañía Miray Cruises que no tiene barco y cancelar la salida, informó un medio del sector.
Life at Sea, una nueva marca del grupo Miray Cruises, prometía la experiencia de una vida en un crucero que debía zarpar de Estambul, Turquía, el pasado 1 de noviembre, pero se pospuso la fecha de salida hasta el 11 de este mes, un aplazamiento que tampoco se pudo cumplir.
La última fecha establecida para la salida fue el próximo 30 de noviembre, desde Ámsterdam, Países Bajos, pero, menos de dos semanas antes de la partida, la compañía informó a los pasajeros que se había cancelado el crucero.
“Miray Cruises ha cancelado oficialmente el crucero mundial de tres años de ‘Life at Sea'”, señaló la revista Cruise Industry News, e indicó que, al parecer, el barco comprometido con Life at Sea, el antiguo ‘AIDAaura’, fue vendido en noviembre a otra compañía, Celestyal Cruises.
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Pasajeros, a la deriva
Varios pasajeros que reservaron algunas de las 111 cabinas vendidas todavía se encuentran en Estambul, ya que llegaron allí antes de la fecha de salida original.
Y otros dicen que no tienen adónde regresar, ya que “vendieron o alquilaron sus casas antes del viaje alrededor del mundo, además de deshacerse de sus posesiones”, recogió el canal de televisión CNN.
La mayoría de los viajeros no sólo gastaron decenas de miles de dólares para realizar el sueño de su vida, sino que ahora se enfrentan a una espera de varios meses para recuperar su dinero.
La compañía indicó, según el citado medio, que abonará los pagos en cuotas mensuales, a partir de mediados de diciembre próximo. También ha ofrecido hacerse cargo del alojamiento hasta el 1 de diciembre, así como de los vuelos de regreso a casa para cualquiera que se encuentre ahora varado en Estambul, pero “algunos dicen que no tienen hogares a donde regresar”.
La directora ejecutiva de ‘Life at Sea’, Kendra Holmes, renunció a la compañía en noviembre y grabó un video para los pasajeros en el que admitía que el crucero no iba a zarpar, según CNN.
En marzo pasado, cuando se lanzó esta propuesta de crucero de larga duración, “las reservas tuvieron un comienzo espectacular, con más de mil 300 solicitudes en las primeras 24 horas”, dijo entonces Mikael Petterson, director gerente de la nueva compañía y de la que se separó en mayo pasado.
La promesa del crucero
‘Life at Sea’ prometía un viaje de 130 mil millas náuticas, equivalentes a 240 mil kilómetros, en una travesía que incluía 140 países y 7 continentes, con escalas en 382 puertos y acceso a 13 lugares declarados maravillas del mundo.
Barcelona, Miami, Río de Janeiro, la Antártida y Seúl eran algunos de los lugares que visitaría.
La página web de Life at Sea sigue todavía operativa, abierta la posibilidad de reserva de cabina y el contador activo con la cuenta atrás para la salida del crucero, el 30 de noviembre.
Así, una cabina en el puente seis cuesta por persona al año 81 mil 639 dólares, con un depósito de reserva de 124 mil 908 dólares.
Algunos pasajeros expresaron a CNN su “sorpresa y consternación por la cancelación” del crucero, ya que habían incluso vendido sus casas o cerrado negocios para embarcarse en esta aventura.
A los pasajeros se les prometían comidas, entretenimiento y actividades recreativas, también “conectividad” y las comodidades y la funcionalidad para poder trabajar a bordo.
El barco incluía un hospital de guardia las 24 horas con visitas médicas gratuitas, clases de aprendizaje y enriquecimiento, y la oportunidad de tener un impacto positivo a través de iniciativas voluntarias y filantrópicas.
Edición Astrid Sánchez
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