Deplora actuación de STPS

Texto y foto: Hubert Carrera Palí
La Jornada Maya

San Francisco de Campeche, Campeche
Viernes 22 de julio, 2016

La tripulación del QMS Delta se encuentra desesperada anímicamente, debido al incumplimiento laboral por parte de la empresa Marítima de Servicios y la falta de apoyo por parte de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS) y de Sanidad Internacional, pues algunos de los trabajadores ya presentan signos de enfermedades respiratorias como consecuencia del acumulamiento de basura a bordo de la nave, denunció en conferencia el abogado laboral Alberto Salazar López.

El litigante señaló que ayer se cumplió el plazo para el primer pago por un millón de pesos a la tripulación. Sin embargo, ni Sakar, Marítima de Servicios “o quien esté en estos momentos de responsable de la embarcación han cumplido con sus obligaciones o con la firma del contrato colectivo de trabajo”.

Aunado a lo anterior, reveló que una embarcación, de nombre QMS Mariachi, también que navega con bandera de San Vicente, Granadinas, se encuentra en la misma situación en el puerto de Tampico, lo que está afectando económicamente a más de 48 trabajadores marítimos y a sus familias, de los que 14 pertenecen a la QMS Delta.

Señaló que aunque México no ha ratificado su tratado internacional en materia de trabajo marítimo, Buroberita será la responsable de llevar a cabo toda la tramitación para que se les cumpla con el pago que se les adeuda por más de tres meses y medio a los 48 tripulantes, estimándose un adeudo total de más de 10 millones de pesos por parte de los propietarios y responsables de esta nave.

Señaló que el QMS ya se quedó sin combustible y avituallamiento, por lo que la Capitanía de Puerto de Seybaplaya, en una determinación importante, no permitirá su despacho hasta que cuente con todas las garantías. Es precisamente ahí donde Buroberita también tendrá que jugar un papel importante.

Alberto Salazar López lamentó la postura de la STPS, que dirige en Campeche Víctor Méndez Lanz, así como de Sanidad Internacional, para verificar el estado en que se encuentran la embarcación y los tripulantes, y pese a que algunos de ellos presentan algún tipo de infección, producto de la basura acumulada a bordo de la embarcación. Se espera que este viernes, si no ocurre otra promesa falsa, el barco quede debidamente avituallado y sobre todo que se cumpla con el primer pago a los trabajadores, que desde hace tres meses y medio no envían dinero a sus familias.