Joana Maldonado
La Jornada Maya

Chetumal, Quintana Roo
Domingo 9 de febrero, 2020

Waybil es una sociedad de producción rural conformada por jóvenes desde hace dos años en Bacalar a partir de un centro demostrativo que utiliza la agricultura sintrópica para impactar en la manera de ejercer la producción de alimentos de manera sostenible, en uno de los sitios de mayor fragilidad del estado.

La agricultura sintrópica es una práctica basada en procesos naturales cuya consecuencia debe ser la preservación de los servicios ecosistémicos, como la regeneración del suelo y regulación del clima en la selva del estado.

Waybil trabaja desde hace casi dos años en un centro demostrativo que tiene un volumen de dos hectáreas. Jorge Espinosa Mata, uno de los impulsores de este modelo, explicó que desde entonces se capacita y capacita a otras personas en la agricultura sintrópica utilizando procesos naturales y no insumos externos.

“Es replicar cómo funciona una selva, pero produciendo alimentos, bajo un sistema regenerativo, que produzca sus propios productos”, dijo.

En el centro demostrativo participan seis personas, la mitad de ellos voluntarios se producen hortalizas, germinados, setas comestibles y una variedad de 20 productos locales como chile habanero, yuca, guanábana, tomate cherry, cítricos, así como huevos de traspatio. Además de productos deshidratados como moringa, toronjil y otros para elaboración de tés.

“Empezamos creando un centro demostrativo que sea un espacio para la gente local y que puedan ver como existen técnicas diversas de producción y modos de vida, para que lo repliquen, que la gente lo crea y se inspire y motive”, señaló.

Aunque la producción no es de grandes volúmenes porque apenas se generan unos 20 kilogramos por semana actualmente Waybil comercializa los productos que cosecha en algunos restaurantes de Bacalar e incluso Chetumal. Los martes y viernes hacen entregas a domicilio cuando recién se cosecha.

Jorge Espinosa precisó que este modelo es adaptable a escalas de agricultura familiar o con fines de comercio, por lo que buscan ser apoyados por el gobierno federal bajo el programa de Sembrando Vida.

Este 2020 el colectivo Waybil está concluyendo la construcción de la infraestructura en las dos hectáreas con las que cuenta para mantenerlo.


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