La escena lírica está estallando: Vere 'Kill Beat'

El rap es música, arte, y también literatura. La rapera Vere Kill Beat, de 22 años, lo sabe. El rap llegó a ella en la secundaria, gracias al maestro José Ramón Triay de la Escuela Secundaria Estatal N53 Joaquín Coello Coello, que le enseñó a expresar lo que siente por medio de las letras durante las clases de español.

“El maestro nos dio un enfoque hacia la literatura porque escribía poesía, nos animaba a redactar ensayos, poemas; y me empieza a hacer ruido el hecho de escribir para decir lo que siento. Nunca había tenido la oportunidad de verlo de esa forma y que me ayudara a mejorar como persona”.

En la zona sólo había un crew de rap con tres jóvenes de Komchén y Kikteil y se interesaron en el material de Vere, letras con contenido personal y directo, como acostumbra el rap. “Me invitaron a hacer rap, pero no escuchaba rap, ni sabía nada del movimiento”; sin embargo, ahora tiene en puerta la realización de su primer disco. 

Cuando se decide a armar su primer beat, supo que no había retorno. Cuenta que le agarró rápido “a la onda” y empezó a fluir. Poco a poco, el crew de la zona la consideró para unirse y hacer música, comenzó a ir a eventos de hip hop, conocer la escena local y sobre todo, a escuchar rap.

“Me di cuenta que es algo accesible, no está fuera de tu alcance. En una compu o en un teléfono hay pistas de rap, es muy accesible, cualquiera que tenga internet puede hacerlo. Yo creo que por eso persistí en el rap, no era algo tan difícil de mantener como hobby”.

Al principio, las letras de Vere hablaban “de un adolescente dolido, lo básico, quejarse de la vida”, pero después pudo cuestionar su fe y religión, ya que vivió en un hogar religioso. También exploró temas como el machismo en la escena del rap. Ahora, Vere habla desde sus adentros y hace critica a la sociedad de manera satírica.

Camino solitario 

A pesar de que en sus inicios la rapera tuvo el apoyo de sus compañeros, confiesa que el camino del rap es un camino solitario.

“No hay nadie alrededor que me observe, no hay nadie alrededor pa’ convencerme, no hay nadie más que yo, no hay nadie más que yo en mi habitación”, dice en su canción S.A.N.A.R.

Al ser la única joven en el sureste que incursiona al hip hop de solista, reconoce que es complicado. Hace unos años salió de su casa familiar para independizarse, dentro de la misma comisaría. Tiene una carrera trunca en sicología y emprendió en un negocio de comida que le ayuda a solventar sus gastos, esta fue una alternativa a las negativas de trabajo por estar tatuada y para adecuarse a sus horarios, cuando tiene compromisos de su carrera musical.

“Vivo un proceso completamente difícil porque no hay nadie a quien me pueda acercar o que me pueda comprender o aconsejando siempre. Me toca a mi sacar el coraje y hacerlo sola”.

Sobre su opinión acerca del futuro del rap, la cantante es clara: la escena del rap en México está estallando, ya que quien quiera comenzar a rapear tiene elementos al alcance de sus manos gracias al Internet y quien no quiera depender de una disquera, hay formas de lanzar su material. 

Las jóvenes en el rap 

Cuando Vere subió un video cantando rap, un usuario le comentó: “Deberías de casarte, dejar de consumir drogas y buscarte un buen esposo”.

“Yo no veo ningún comentario así en alguna canción de hombres. Yo creo que más bien los estigmas son esos, no se toman el tiempo ni siquiera en escuchar lo que dices o a veces ni le entienden”.

No cualquier joven se enfrenta a su familia para decir que no quiere casarse o tener hijos, pero acercarme a lo profesional me ha ayudado”, menciona.

Para Vere, ser mujer en el rap es perseguir dos caminos: o permanecer en un modelo masculino y tratar de ser un hombre, y nulificar tu feminidad para obtener la aprobación masculina de la escena; o ser mujer y ganarte el respeto de todas las mujeres.

“Yo decido romper con todo esto, porque me tocó ver ambos lados durante estos años e inicié un proceso de cambio y adaptándome a verme como una mujer, yo misma tenía muchos prejuicios porque creía que eso no era rap”.

Ahora, Vere adorna su cabellera oscura de trenzas, sus manos con uñas afiladas y muestra con orgullo su cuerpo, “ muchas chicas me dicen: me gustaría ser como tú y tener el valor. Es algo que siempre me impulsa” menciona.

Para lograr la unidad como género, la rapera recalca que es importante crear alianzas entre mujeres y formar círculos de confianza. 

“Necesitamos sumar morras y que ellas también se empoderen, los hombres mucho tiempo se han sentido bien y tienen alianzas, si ellos tienen sus alianzas, ¿por qué nosotras no?” .

Para finalizar, Kill Beat mencionó que es importante que el rap en la península de Yucatán tome fuerza por medio de redes sociales, hacer eventos y alianzas en los que puedan desarrollar un show de calidad, ya que en ocasiones no les permiten manejar cierto volumen o deben censuran algunos temas.

Sigue leyendo:

Sigue leyendo:

-Hip hop, una forma de resistencia viva en Yucatán

-El hip hop desde su cuna, en el Bronx

-No hay nada que el hip hop no pueda expresar: 'Padre Anderson'

-Rap en maya, una forma de resistencia de la lengua

-Flow desde el Cereso: Nano 'El Cenzontle' relata cómo logró escribir tras las rejas

-El rap es el vehículo más potente que hay para proyectar sin estar pegando en la radio: 'Pat Boy'

-La Hijas del Rap: hacer crítica social desde la fiesta y el goce

-Las raperas hemos tenido que crear nuestros propios espacios: Audry Funk

-Tornamesistas del Mayab, más de una década ''poniendo el beat'' en las fiestas

-Hip hop, u chíikulal láayli’ ts’aka’an kuxtal lu’umil Yucatán

-Bobokchi’ ich maaya, uláak’ bix u mu’uk’ankúunsa’al le t’aano’

Edición: Ana Ordaz