La Hijas del Rap: hacer crítica social desde la fiesta y el goce

Especial: Hip Hop, abrazo cultural

Para Nany Guerrerx, en Yucatán vivimos en una ficción donde creemos que en este estado, en esta ciudad, no sucede nada, cuando aquí “¡sucede de todo!, desde la trata de niñes hasta asesinatos”, entre otros problemas sociales, expuso.

“Es una ficción que les conviene sostener. Y a estas alturas, es de verdad muy miope creer que todo México se está cayendo por la violencia del narco, el gobierno, los empresarios, pero que aquí, en Yucatán eso ‘no pasa’”, manifestó.

A estas alturas, subraya, no sé si es control o miedo, verdadero terror a alzar la voz. “Yo no vivo con ninguna paz en esta ciudad que llaman ‘la ciudad de la paz’. ¿Paz para quiénes? Para los ricos, para los políticos”.

Nany Guerrerx forma parte de la agrupación Las Hijas del Rap, junto con Phana Mulixa, Leona y Bgirl Sol; sus letras abordan una diversidad de temas, sobre todo enfocados en la identidad, el género, las luchas sociales y el movimiento feminista. Así como pueden lanzar críticas contra megaproyectos como el Tren Maya, también tienen canciones sobre la aceptación de las y los cuerpos, y romper con los estereotipos impuestos por la sociedad. 

“Nos enfocamos en hacer crítica social desde la fiesta, la alegría, el disfrute, el goce”, indica Sol.

En entrevista para La Jornada Maya, señalaron que antes de Las Hijas del Rap, cada una tenía una trayectoria como hip hoppas: en la danza urbana, en los eventos callejeros, en las batallas, en la fiesta, en el rap, hasta en el diseño/arte urbano; fue hasta que empezaron a colectivizar cuando se dieron cuenta que estar en grupo era una amenaza, que ver a tantas morras/morrxs juntas incomodaba mucho.

“Colectivizamos a partir de la necesidad de tener nuestros espacios, nuestros procesos, muy distintos a los que predominaban en el rap. No sólo teníamos distintas agendas e intereses, sino que constantemente éramos violentadas e invisibilizadas en la escena hip hop”, subraya Nany.

¿Por qué elegir el rap en específico para expresarse ? 

Nany.- El rap me ofrecía la posibilidad de narrar mi historia, desde la cultura que ya vivía, y hacer política con la voz. Nuestras historias son valiosas y merecen ser contadas. Usar la palabra, la fiesta, el cuerpo danzante es algo que traigo muy arraigado, lo siento muy cerca a mi raíz. Cuando comencé a participar con Las Hijas del Rap, ver a mis hermanas incendiar con su poderoso canto, me hizo encontrar un canal que no había explorado antes.

¿Qué buscan reflejar en sus canciones? ¿Qué temas abordan? 

Sol.- Nuestras realidades en un contexto capitalista, conservador. 

Nany.- Creo que si algo nos conecta, son las ideas. Tenemos valores y enfoques éticos muy similares y eso nos permite crear música con un discurso muy definido y claro.
 

¿Buscan igual darle una perspectiva de género, y un enfoque feminista en sus canciones? Y si es así, ¿cómo influye en el género del rap? 

Nany.- Creo que es algo que fluye natural, no es como que pensamos: “¡oh! ¡Hagamos una canción feminista!”. Sino, nuestras posturas son esas y son muy diversas entre sí. Nuestras vivencias son las que hacen que nos nombremos de cierta forma u otra, pero también sabemos que “feminismo” es sólo una palabra, al final estamos luchando por la vida digna.

Y sí, eso influye profundamente nuestro rap, porque cuidamos que lo que decimos vaya acorde a lo que hacemos; que podamos sostener el peso de nuestras palabras y ser responsables de nuestro mensaje. Sabemos lo poderosa que es la palabra y por eso narramos nuestras vidas, nuestras luchas y nuestros sueños.

¿Persiste el machismo en el hip hop yucateco? 

Phana.- Ser una hip hoppa que denuncia, que se defiende, que tiene una postura ante la violencia y la misoginia ha incomodado a muchos machitos. Han reaccionando huyéndole a la responsabilidad, desacreditando, dando carpetazo, acosando y promoviendo el odio entre sus círculos cercanos.

Raperos, tornamesistas, bboys y agrupaciones de hip hop en la península de Yucatán han sido denunciados en redes sociales, en conversatorios y en tendederos por violencia, abuso sexual, abuso de poder, por violación, por corrupción y aún así les siguen otorgando premios, apoyos y financiamiento por el gobierno en eventos y festivales.

¿Con su música, y sus letras, han inspirado a más mujeres, niñas a dedicarse al rap, o cambiar su conciencia social? 

Sol.- Sí, al menos en nuestros círculos cercanos, inspiramos a las sobrinas, hijas, primas… así como compartimos herramientas a nuestras amigas de Kimbilá que las extrañamos mucho, o hacer espacios para niñes como el Festivalito HH.

Nany.- ¡Sí! ¡Nosotras también hemos sido muy inspiradas por compañeras/es muy talentosas/es! Reconocemos el impacto que tiene nuestro proyecto pero también reconocemos el enorme impacto que han tenido otros proyectos de mujeres, de sexodisidentes, de hermanxs en la lucha en nosotras. Tenemos una larga lista de inspiraciones porque es real que ya hay mucha gente haciendo cosas increíbles, sólo tenemos que dar a conocer más a esos maravillosos proyectos. ¡Aprovecho a agradecer a todas las personas tan luminosas que se han aparecido en nuestro camino y que nos han ayudado a expandir nuestro canto, nuestra lucha!

¿En el estado, y en la ciudad se lucha por los derechos de la mujer? ¿Se promueve la inclusión, el respeto y la igualdad de género? 

Sol.- No, cuando les conviene. 

Nany.- ¡De ninguna manera! Por poner un ejemplo real y burdo: el gobierno enfoca sus políticas en dar talleres de empoderamiento a las mujeres de los pueblos, pero es el mismo gobierno, en alianza con la élite empresarial, quienes les está quitando sus tierras, explotándolas, contaminando sus recursos. Se usan estos discursos para sostener la mentira de que se hace algo por los pueblos, por las mujeres, por las diversidades y no es verdad.

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-Hip hop, u chíikulal láayli’ ts’aka’an kuxtal lu’umil Yucatán

-Bobokchi’ ich maaya, uláak’ bix u mu’uk’ankúunsa’al le t’aano’

Edición: Ana Ordaz