Foto: Fernando Eloy

Hasta 2017, Quintana Roo mostró el mayor porcentaje de mujeres en edad fértil de México -entre 15 a 49 años- con 59.9 por ciento, mientras que la media nacional fue de 53.6 por ciento; sin embargo, también muestra una de las tasas más bajas de fecundidad en todo el país.

Según el censo más reciente del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), en Quintana Roo hay un millón 857 mil 985 habitantes, de los que 921 mil 206 son mujeres, equivalente al 49.6 por ciento, y 936 mil 779 son hombres; 50.4 por ciento, mientras que en el país hay 95 hombres por cada 100 mujeres.

Quintana Roo, junto con la Ciudad de México, Baja California y Baja California Sur, presenta la tasa de fecundidad más baja del país. Los datos más recientes del Inegi apuntan que el promedio de hijos nacidos vivos de las mujeres de 12 años y más era de 2.3 hasta el año 2000, mientras que en 2010 fue de 2.0 y en 2020 es de 1.8; a nivel nacional es de 2.2 hijos por mujer, siendo la más alta en Chiapas.

De los nacimientos registrados hasta 2015, casi nueve de cada diez corresponden a madres con edades entre 15 y 34 años, particularmente tres de cada 10 nacimientos registrados ocurren en madres de entre 20 a 24 años, en tanto que casi una cuarta parte se presenta en mujeres de 25 a 29 años. Por el lado del padre, en seis de cada diez nacimientos su edad oscila entre 20 a 34 años.

Esta estadística muestra que la edad media de la primera relación sexual por entidad federativa, hasta 2014, era de 17.7 (en los individuos en el rango entre 25 a 34 años) y 18.1 en la generación de 35 a 49 años.

El Inegi apunta que en el análisis del comportamiento de nacimientos registrados considerando el estado conyugal de la madre, del año 2000 a 2015 se muestra una disminución importante entre las mujeres casadas, que pasó de 54.1 por ciento en el primer año a 31.6 por ciento en el último, lo que significa una contracción de 22.5 por ciento; por el contrario, el porcentaje de nacimientos donde las madres son solteras o viven en unión libre exhibe incrementos de 3.3 y 18.9 puntos porcentuales en 2000 y 2015, respectivamente.

Las féminas viven más

De acuerdo con el Censo, 65 de cada 100 personas de 12 años y más son económicamente activas. La tasa de participación económica es de 81.2 en hombres y 55.6 en mujeres.

La esperanza de vida de los hombres alcanza los 72.9 años, mientras que la de las mujeres es de 77.9 años. En el caso de Quintana Roo es de 78.4 para mujeres y 73.6 para hombres. En la tasa de defunciones accidentales y violentas, hasta 2017, se registraron 1.8 en mujeres por 7.9 hombres.

Mujeres, más afectadas por el desempleo

De la población femenina con actividad económica, el 79.31 por ciento está afiliada a algún servicio de salud; en Benito Juárez y Solidaridad se concentra la mayor proporción de mujeres sin derecho-habiencia a los servicios de salud, aunque las enfermedades que predominan son exclusivas en ellas, como el cáncer de mama, cervical y quistes de ovario.

Según la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo, hasta el tercer trimestre de 2020 la situación laboral de las féminas ha sido más afectada por la contingencia sanitaria, en comparación con los hombres, con una pérdida mayor de empleo, una recuperación más lenta de la ocupación y condiciones laborales menos favorables.

Hasta 2019, según la misma encuesta, la tasa de participación económica de personas de 15 años o más es de 83.35 por ciento de la población en edad de trabajar en el caso de los varones, mientras que de mujeres sólo fue de 51.35 por ciento, eso significa una brecha de 32 por ciento.

“Esta estadística revela la existencia de una brecha salarial importante, incluso seis veces superior al promedio nacional, que es de .50 pesos, en el que las mujeres de 15 años o más ganan 3.37 pesos menos por hora trabajada, pues mientras que los hombres tienen un ingreso de 43.55 pesos por hora, ellas obtienen un promedio de 40.19 pesos. También en desventaja, las mujeres tienen una tasa de informalidad laboral superior a la de los hombres en un .73 por ciento”, señala el estudio.

 

Este trabajo periodístico es parte de un especial que La Jornada Maya preparó este 8 de marzo en conmemoración del Día Internacional de la Mujer. La cobertura completa la puedes conseguir a continuación:

 

- Ser una caja vacía u otras formas de luchar después del 8M

- Carta al presidente en el día de la mujer

- Pandemia rompió el miedo: estudiantes conforman colectivas para denunciar abusos

- Soy una feminista rabiosa: Maru Medina

- Hay que luchar por nuestros derechos: Marián

- Ser mujer es superarse, salir adelante y trabajar el doble: Azeneth

- Ni siquiera querían escucharme por ser mujer: Rocío

- Mujeres produciendo con huevos, proyecto de vida de Itzel Suárez

- Somos factor de cambio en temas vanguardistas: Jaqueline

- 8M: Las protestas de mujeres que cambiaron el mundo 

- Femen, el grupo ucraniano que protesta con los senos desnudos

-Vital, pelear por los derechos de todos en un mundo diverso: Fridman Hirsh

-Aunque en teoría hay avances, todavía queda mucho por hacer: Maricela Flores

-La mujer emancipada

-Uniformes Vargas, 52 años de poder femenino en su máxima expresión

-'Nenis' llevan décadas luchando contra un sistema que precariza a las mujeres

-Independencia económica nos da libertad para tomar decisiones propias: Aracely

Edición: Ana Ordaz 


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